Hablemos de webcómics

Hablemos de Amdeni, Las Paridas de la Guarida y Las crónicas de Matilda

Amdeni https://mega.nz/#!TUJDWZ6T!aEZ9z1Oqv7Cu4bJSkgOcG7NxuxYB6dYMduFIVmcfuvM

Amdeni es la trágica historia de amor obra del co-autor original de Cote Gótica, un clásico dónde los haya en Subcultura. La protagonista es una niña llamada Elinné Ardish Reebó. Creo. Aunque el problema no radica en lo colorido y exótico de su nombre, es que veréis, las casi doscientas páginas del cómic se leen así:

Elinné (creo), llega al colegio y nos presenta a sus amigas y a la abusona de clase que posee un trágico y secreto pasado. Sin embargo, no volverá a hacer acto de presencia en el resto de la historia. Pero eso no significa que Elinné este libre de problemas, ya que resulta que está enamorada de su mejor amiga, Dariel. En el día a día calmado y relajado de Elinné descubrimos tanto que le aterra confesar sus sentimientos a su amiga como que Dariel toma medicamentos a diario debido a una enfermedad cardíaca sin especificar. Tras esta fase de introducción quedan plantados los desencadenantes de lo que vendrá luego.

Al día siguiente las amigas participan en un torneo de voleibol en el que la capitana de uno de los equipos rivales, Narma Dhibó, necesita tanto ganar para sentirse válida que le rompe el brazo a una de las amigas de Elinné. A pesar de su determinación (y de sus trampas), pierde ante el grupo de amigas y movida por la venganza encuentra el diario de Elinné en su mochila. Entonces planea separar a Elinné y Dariel en un cuarto para sorprender a Dariel con la noticia de que su amiga es lesbiana y quiere meterle de todo menos miedo. Para fastidio de Narma, Dariel se lo toma a bien y le dice que aunque no pueda corresponderla, seguirá siendo su amiga. Narma, rabiosa, le da una paliza a Elinné y Dariel, debido a que se olvidó las pastillas en casa y por el estrés de la situación, se desmaya por un fallo cardíaco. Y ahora es cuando empieza lo bueno.

La historia comienza con calma y suavidad, dejando que se forme la tormenta de fondo. Entonces, siguiendo una estructura clásica de tres actos, llega el momento del nudo en el que la heroína debe cruzar por una prueba de dolor para salir renovada y más fuerte que antes. Y si hay algo que caracteriza a Amdeni, es el drama desbocado.

Entran profesores y alumnos en el cuarto atraídos por el jaleo, Narma le grita a todos que Elinné es lesbiana, unos ambulancieros se llevan a Dariel y Narma convence a Elinné de que su amiga se ha muerto porque ella es lesbiana. Cuando vuelve a casa, su padre adoptivo la deshereda por desviada. La muchacha corre sin rumbo por las calles hasta parar en un parque cuando se echa la noche. Mientras duerme, aparece un pederasta que intenta violarla a punta de cuchillo. Elinné logra escapar con ayuda de un perro callejero para encontrarse a Alebel, una niña a la que le gusta cocinar galletas a las cuatro de la madrugada en el horno prestado de un panadero que luego reparte entre el barrio. Debido a esto es conocida como “galletita con chips” y sueña con ser maestra pastelera. Esto me lo imagino como que le dan un diploma certificando que ha aprendido a cocinar ciento cincuenta pasteles distintos.

A los pocos minutos de decirle esto, galletita con chips le confiesa que su padrastro abusa sexualmente de ella a diario y amenaza con matar a su madre si dice algo. Entonces aparece el padrastro, que es el violador del parque, y a punta de pistola las amenaza para que Elinné se ponga a cuatro patas para vengarse de ella. Galletita con chips se sobrepone a su miedo y ayuda a Elinné a escapar. Pero es tarde para ella y es asesinada por su padrastro de un balazo. Tras esto, Elinné se vuelve amarilla, como Smithers en Los Simpsons.

Esto ya parece un cómic de Jack Chick y todavía no hemos acabado. Tras este punto el drama se vuelve tan intenso que los acontecimientos se suceden sin ningún tipo de lógica que los conecte.

Nuestra heroína, destrozada por todo lo sucedido en el transcurso de un día, cae dormida en medio de la calle. Cuando se despierta lo primero que decide es suicidarse tirándose al río, mas es interrumpida por una pelirroja, Thiara, a la que no conoce de nada pero que la estaba buscando porque se lo dijo el horóscopo para decirle que todo saldrá bien. Tras discutir, oyen por casualidad a unas vecinas decir que galletita con chips al final se salvó y detuvieron al padrastro antes de que lograra matarla. Elinné se vuelve amiga de Thiara, quien se saca un libro de debajo del sombrero para regalárselo, provocando un Title Drop.

AMDENI: Amor de Ninfas. Resulta que el cómic no estaba bautizado con el mismo generador de nombres aleatorios que los personajes. Tras despedirse de Thiara, Elinné se reencuentra de pura potra con su hermano quien le da cobijo en su casa y con el perro callejero que la salvó antes a quien adoptan ambos. Tras recuperarse gracias a los familiares que sí la aceptan, va a pasar el día en el centro comercial donde aparecen sus amigas por casualidad y de las que se había olvidado por completo. Entonces llega el momento de la última revelación: Dariel está viva. Se dan un abrazo y se acaba de golpe.

Y esa es la historia de Amdeni, un cómic sobre drama, niñas, drama, galletitas con chips, viejitos pascueros, drama, nombres de Tolkien, páginas del tamaño de un cromo y drama.


Las Paridas de la Guarida http://lpdlg.subcultura.es/

Las Paridas de la Guarida es un webcómic fetichista en el que… Perdón, se me han cruzado los papeles. Las Paridas de la Guarida es un webcómic fanfiquero en el que se cruzan todos los universos de cualquier cosa que le interese al autor, sea Mortal Kombat, Sailor Moon, Marvel, Touhou y, con cierta frecuencia, webcómics españoles. De hecho parte de sus personajes pertenecen a un fanfic de Megaman que hizo tiempo antes del webcómic. Eso no es necesariamente malo. Porque a ver, entre otras cosas vemos a Sailor Mars exorcizando un retrete en el que se ha colado un horror lovecraftiano. O al señor Pérez sufriendo una comunidad de vecinos en la que el presidente es Shao Khan. Tiene gracia lo mires por donde lo mires. No se aleja tanto de la fórmula con la que lo peta Manly Guys Doing Manly Things.

Las página son entretenidas, aunque tengo que hacer unas excepciones con el principio y el final del archivo. El principio adolece de la fase “¡Voy a hacer un webcómic!” clásica de muchos primerizos (aunque hoy en día con la abundancia de webcómics maduros y con calidad es más rara de ver, pero eso es otra historia para otro momento). El primer puñado de páginas se sostiene sobre referencias a la vieja (entonces actual) comunidad de webcómics en español, lo que hará que el público actual no sepa de qué habla. Respecto al final, llegó un punto en el que Draug le cogió algo de asco a su propia obra y se nota por la forma de acabarlo a toda costa. Una pena que el final hecho a marchas forzadas para matarlo de una vez empañe el trabajo y la dedicación que caracterizan a Draug cada vez que se pone ante un lienzo en blanco. A poca gente he visto dibujar tumultos y ciudades completas, persona a persona y edificio a edificio como aquí. Como decía, que los personajes se cuenten por decenas no es tan problemático.

El problema es que iba a listar a los personajes principales y decidí no hacerlo. Está, entre muchos otros, el elfo que quiere volver a casa, el samurai con nosequé de que se ha vuelto maligno o los androides de Megaman que han aparecido en Madrid de golpe y les da igual. Sus respectivas razones de ser nunca son relevantes a las situaciones entre manos y nunca llevan a nada. Sekmeth es una androide de guerra metida a profesora de escuela y, a pesar del potencial de la situación, aparece ejerciendo de profesora en tres viñetas o así. La vida de Clara como semigiganta aparece más a menudo, pero para señalar a Lucas diciendo que qué mal la macrofilia, qué mal de la cabeza hay que estar. Al final son los extras de alrededor los que tienen vidas interesantes y crean situaciones en el webcómic mientras que los protagonistas son los que hacen de extras. Menos Monty Pantheon, que es el que mejor cae porque es al que le pasan cosas.

Quizás por eso tengo tantas ganas de que empiece el cómic protagonizado por Clara. Es una superheroína metida a actriz de serie B que tiene que lidiar con encajar en el mundo y con que la ronde sin parar un baboso al que lo único que le importa es su altura. Clara puede molar, sólo necesita la oportunidad.

Además Patroklo hace un cameo en Las Paridas de la Guarida robándole ropa usada a una furry de Sonic. Yo creo que sólo por eso ya vale la pena leerlo.


Las crónicas de Matilda http://matilda.subcultura.es/

Fanzine nominado a mejor webcómic en el Expocomic 2013 y finalmente convertido en webcómic, dibujado y escrito mano a mano entre Defriki, Zelgadis y Fadri.

Me hicieron gracia dos chistes.

Ese nivel tenemos.

Le pregunté a Fadri si la broma del árbol que aplastaba a los piratas y lo del disfraz de Mario eran suyos y me confirmó que sí. La historieta entera consiste en repetir cuatro o cinco chistes en un esfuerzo titánico por llenar treinta páginas. Entre tres personas. Uno de ellos consiste en llamar medieval a las cosas y, en su mayor despliegue, llegan a hacerlo cuatro veces consecutivas esperando que, esta vez sí, sea desternillante.

Ese nivel tenemos.

Otra de las bromas son las elfas que hablan usando palabras al azar en cada página. Se vuelve muy pesado muy rápido. En un giro irónico, otra de las bromas recurrentes es que un personaje haga un chiste tonto y le respondan que no es gracioso.

Es verdad que no podía esperar mucho de un cómic que improvisaron una noche que estaban los tres juntos en una quedada de un salón de cómic hace años y años. Lo que no esperaba es que lo imprimieran y le pusieran precio. Cuando me pedisteis hablar de A Friki’s Life en la tanda anterior respondí que, bueno, tampoco es que sufras ni nada leyéndolo. Esta vez no me siento capaz de decir lo mismo.

Los puntos positivos son que Reiv es mona y que hay un personaje de fondo que se parece a Jenny Everywhere pero que seguro que no es, que es un personaje que lo conocemos cuatro personas.

Ese nivel tenemos.